
SMART BOOSTER

Cada vez Facturo más y gano menos
Cuando iniciamos un proyecto, tenemos especial cuidado en los gastos. Sin embargo cuando la empresa se encuentra en un proceso de crecimiento, es fácil estar más dispuesto a invertir en determinadas partidas, para las que antes no había presupuesto.
Esta inversión sin control ni estrategia, puede llevar a reducir la rentabilidad de nuestra empresa, incluso a hacerla desaparecer.
Para poder tomar decisiones relacionadas con inversión, es importante tener identificadas las necesidades de la empresa y encajarlas dentro del presupuesto anual.
Déjanos elaborar o revisar tu presupuesto y analizar los gasto de tu empresa, para ayudarte a tomar decisiones, que hagan crecer tu rentabilidad.
Mi estructura crece sin control
Tu empresa está ON FIRE, cada vez tenéis más clientes y por tanto tu plantilla se encuentra en constante crecimiento.
Cuando esto ocurre, es difícil dejar de atender al cliente, para entender que esta pasando dentro de tu empresa.
Definir los puestos, establecer procedimientos, dibujar el organigrama, y elaborar un plan retributivo sostenible, es vital.
No hacerlo puede llevarnos a la improductividad, problemas en la comunicación, al descontento y a la fuga del talento.
El valor añadido de las empresas está en las personas.
No crezcas sin control; organiza tu estructura.


Facturo + de un millón pero no tengo conocimientos financieros
Cuando empezamos un proyecto, el área fiscal contable es una gran complicación que decidimos subcontratar a un profesional externo.
Este planteamiento tiene coherencia cuando iniciamos la actividad y no hay presupuesto para destinar un recurso a estos menesteres. Pero cuando la empresa alcanza un determinado tamaño, la contabilidad, la fiscalidad, el control de costes y la tesorería; tienen que estar integrados dentro del proyecto, como cualquier otro departamento productivo, para poder ejecutar su función correctamente.
Te ayudamos a capacitarte a ti y a tu equipo, para poner en marcha uno de los departamentos más importantes de la empresa.
¿puedo pedir alguna ayuda?
Las ayudas y subvenciones nunca pueden formar parte de nuestro plan financiero de negocio y tampoco de la estrategia.
Pero si existen y están a nuestro alcance, hay que pedirlas. No hacerlo supone desperdiciar un recurso a nuestro alcance, y generar una ventaja para aquella competencia, que si lo haga.
Aprovecha la oportunidad y haz tuya la ventaja.
